jueves, 1 de julio de 2010

Nuestro límite es el cielo...


Esta tarde, estaban los niños viendo Extreme Makeover Home Edition, mientras yo trataba de descansar; no sé de que año era el capítulo, por llamarlo de alguna manera, que estaban echando, pues a estos le perdí la pista cuando me vine a vivir para acá; la fecha no es realmente importante, lo que quiero contar es que, tratando de dormir escuché al hijo mayor de la familia cuando, respodiendo a una pregunta, dijo: "la gente piensa que porque yo soy ciego, soy discapacitado, pero yo no veo mi ceguera como una discapacidad, la veo como una capacidad, porque yo soy capaz de ver a los demás como son, no lo que me enseñan mis ojos; los veo con el alma y el corazón, no veo su color, ni su físico, veo en su interior..."; cuando escuché esto sentí que la discapacitada soy yo, me dí cuenta que tiene toda la razón cuando dice, que nosotros los que podemos ver somos los que realmente estamos ciegos. Ya lo decía El Principito, en una de sus frases: "lo realmente importante es invisible a los ojos, pero no al corazón".

No sé cuantos programas de estos he visto, sin embargo este llamó mi atención, porque siempre he pensado que nosotros llegamos adonde queremos llegar, que somos nosotros mismos los que nos ponemos nuestros límites, y a veces, también el de nuestros hijos. Alguna vez escuché a alguien decirle a los niños, si quieres ser astronauta, esfuerzate y lo lograras, porque hay astronautas en la NASA que una vez fueron niños como ustedes. En el caso de la persona de este programa, él es el primer hijo de un matrimonio, nació con anomalías múltiples: nació sin ojos, con los parpados cerrados y sin capacidad para extender sus extremidades en 180º, actualmente es un adulto que necesita de sillas de ruedas para moverse; luego de varias operaciones lograron separarle los parpados y colocarles ojos de vidrios; sus padres decían que no permitieron que su hijo se regodeara en sus miserias, y le enseñaron que el podía lograr lo que quisiera, porque su impedimento era físico, no intelectual; aprendió a tocar el piano y toca la trompeta en la banda de la universidad, ayudado por su padre que es quien le mueve la silla de ruedas, pues él no puede por la falta de movilidad en sus brazos. Al momento en el que emitieron el programa, estaba por grabar su propio disco con canciones escritas por él.

No sé quien me despierta mas respeto y admiración, si el niño por haber llegado a hacer cosas que yo con todas mis "capacidades" no he hecho, o sus padres por no permitir que su amor de padres y su instinto de protección impidieran a su hijo volar con alas propias.

Esto es algo que quería compartir con ustedes, porque pienso que todos nosotros estamos incapacitados por nuestras capacidades; tenemos vista y no miramos, tenemos oídos y no escuchamos, podemos hablar y no nos comunicamos, tenemos brazos y no abrazamos, tenemos piernas y no caminamos, tenemos manos y no acariciamos; porque el mundo va muy de prisa, porque no tenemos tiempo, porque se nos hace tarde, porque llegamos mas rápido en el coche...

2 comentarios:

Jose dijo...

Lo se Mami y esa capacidad es fenomenal

Anónimo dijo...

me deja sin palabras lo leido, es verdad, muy cierto lo mencionado con respecto a cada uno de nosotros, tenemos todas las facultades para triunfar y ser felices pero lamentablemente nos dejamos morir hasta en el incombeniente mas ilogico y pequeño que se nos presente